Los justos

No hizo falta la insitencia con la cual Mery Z, mi profesora de Literatura en la secundaria, nos recalcaba una y otra vez que leyéramos Borges para entender el por qué de todo el culto que lo rodea, y aunque resulte extraño en este blog, hoy le rindo homenaje no publicando un extracto de cualquiera de sus cuentos sino a través de una poesía (aunque el nombre del blog es como una pleitesía constante).
La poesía es un género que no me atrae en lo absoluto, particularmente creo yo porque es muy fácil cruzar la línea de lo poético para trasladarse a lo cursi. Sin embargo, muchas de las del señor Borges son insuperables, y aunque ésta no sea particularmente la que mas me guste, creo que es apropiada para inagurar el género en este blog.


Los justos
Un hombre que cultiva un jardín, como quería Voltaire.
El que agradece que en la tierra haya música.
El que descubre con placer una etimología.
Dos empleados que en un café del Sur juegan un silencioso ajedrez.
El ceramista que premedita un color y una forma.
Un tipógrafo que compone bien esta página, que tal vez no le agrada
Una mujer y un hombre que leen los tercetos finales de cierto canto.
El que acaricia a un animal dormido.
El que justifica o quiere justificar un mal que le han hecho.
El que agradece que en la tierra haya Stevenson.
El que prefiere que los otros tengan razón.
Esas personas, que se ignoran, están salvando el mundo.


S.

Los Medios

"Sin debate, sin crítica, ninguna administración y ningún país puede sobrevivir. Es por eso que el legislador ateniense Solón decretó que un ciudadano que escapaba de las controversias cometía un crimen. Y es por eso que la prensa fue protegida aquí por la Primera Enmienda de la Constitución. Es el único negocio protegido constitucionalmente. Y no lo está principalmente para divertir y entretener. No lo está para enfatizar lo trivial y lo sentimental. No está protegida para “dar al público simplemente lo que éste quiere”, sino para informar, para enardecer, para hacer reflejar, para mostrar nuestros peligros y nuestras oportunidades, para indicar nuestras crisis y nuestras opciones, para liderar, moldear, educar e incluso a veces, para hacer enojar a la opinión pública…"

John Kennedy
En mi casa se compra La Nación los fines de semana. Se solía mirar Telenoche, pero hace poco cambiamos el noticiero por cualquier otra cosa que esté dando vueltas, alguna película, serie, o lo que sea. A la mañana, en esa época que está próxima nuevamente, en la cual todos nos levantábamos temprano, TN era la elección (no tanto por las noticias sino más por los informes de Confesore sobre el tiempo).

Estos medios, más alguno otro que vistamos por Internet (Clarín, El País de España, etc) son los que nos mantienen “informados”.

Hace un tiempo ya que me viene pasando, que no puedo ver un noticiero sin sentir repulsión por las noticias que exponen, ya sea por la calidad de lo que informan o cómo es presentada la información. Continuamente, la televisón nos muestra lo que sucede a nuestro alrededor según la óptica de quiénes transmiten lo acontencido, en el 90% de los casos, a través de elementos melodramáticos y muchas veces apelando a golpes bajos. Estoy saturada de noticias que se suceden una y otra vez ( los robos, los accidentes de tráfico, etc.) que muchas veces reciben más exposición de la merecida, habiendo tantas otras noticias que, intereses de por medio, nunca ven la luz.
No es sólo una cuestión de qué nos muestran o nos dejan de mostrar, sino cómo lo hacen. Sin ir más lejos, un noticiero que se jacta de ser "serio" como lo es Telenoche puede parecerle objetivo a una audiencia desprevenida (sin entrar en el debate sobre si existe o no la objetividad, más allá de que sí difícilmente existe en otros ámbitos, mucho menos lo hace en los medios).
Aquella idea que me inculcaron en el secundario acerca de lograr una mirada crítica sobre las cosas es imposible sin una consulta simultánea de fuentes de información, para intentar extraerla, depurarla, y alcanzar así una opinión propia sobre lo acontecido. Al mismo tiempo, no puedo dejar de pensar que en algún punto me estoy refiriendo a un tema con cierto carácter elitista, teniendo en cuenta que a la gran cantidad de ciudadanos que no poseen sus necesidades básicas satisfechas poco les importa obtener información de calidad teniendo en mente otras preocupaciones.
En resumen, odio los medios. Si no fuese por Mery Zeballos, que me mostró otras alternativas, este año estaría comenzando mis estudios para unirme a la lacra de los periodistas, en lugar de las sanguijuelas de los abogados.
Continuará...
S.

Life at Uni.

A la espera de la vida universitaria y descubriendo cada vez más gente que va a venir a mi facultad (para bien o para mal) dejé de lado ya mi dilema de si es el lugar correcto para mí o no. Supongo que la universidad perfecta no existe, y si bien la que elegí sé bien que no es perfecta, tiene muchas otras cosas para ofrecer que espero aprovechar. De última, cambiarse a otro lado siempre es una opción.
Suerte a quiénes andan haciendo ingresos en distintas universidades, en especial a aquellos capos que no se anotaron en la UBA como segunda opción.

Estoy de humor raro, por no decir de mal humor, creo que es el día de mañana que me pone así.

S.

Resumen (inevitable) de MDQ

No me gusta demasiado la playa, por lo que fueron unas vacaciones en la costa que tranquilamente podrían haber tomado lugar elsewhere. Salvo las visitas a la carpa de la familia Torbidoni, creo que cuando íbamos por nuestra cuenta no habremos pasado más de 2 horas en la playa.
La rutina consistía en levantarse entre las cuatro y las cinco y media, almorzar o merendar, y buscar algo para hacer ya que el día de playa estaba inevitablemente perdido. Ver películas, ir a ferias de diseño, salir por Güemes, ir al supermercado y demás.
Luego cenábamos (arroz, fideos o patitas de pollo) y a eso de la una partíamos a Alem, para pasar las noches en Bykein, Samsara, Varnon, La Princesa, Mezcalita...o en la misma calle Alem, caminando de un bar a otro mientras nos rebotaban porque alguna pelotuda siempre se olvidaba el documento, en busca del amor de verano (que este verano no tuvo ganas de aparecer).
Luego de noches raras, en las que íbamos de un lado para otro, terminabámos desayunando medialunas de la Boston ( a la cual íbamos A PIE DESDE ALEM CON TODO EL VIENTO QUE HAY A LAS 7.30 AM...), shawarmas en Alem o pizzas en Manolo.

¿Personajes que completaron nuestars vacaciones? Mica, Greco, Guido y el clan Torbidoni, y Juan Piloto y Mati Shaggy (dupla pseudo homosexual que veíamos a la fuerza para bancar a Jacky).

Insoportables: los tarjeteros.No, por enésima vez, no quiero ir a bailar a ese boliche pedorro que tenés en la loma del orto, fletate flaco.

Personajes secundarios del verano: la barra del Don Bosco, el perro del stand de los shawarmas, el de la chocotorta, el Mini Cooper.


En una nota aparte, quisiera decir que a pesar de que la pase genial, Mdq es asquerosamente repugnante. Creo que nunca voy a volver a vacacionar ahí voluntariamente. La siguiente suma explica el porqué:

Microcentro de Buenos Aires + agreguéle mar = MDQ.

Villa La Angostura, esperame que el año que viene estaré por allí.


S.

Chivo.

Basta de la falta de inspiración para encontrar un tema sobre que escribir: en Cazadoras Sin Presas nos proponemos temas para facilitarle la tarea a la imaginación. Quién quiera pasar a dejar un tema, está invitado.

Cher, creo que el tema que dejaste en mi posteo anterior lo voy a trasladar a ese blog. Entre las temáticas ya propuestos, abordé:
Las Cursilerías: http://sinpresas.blogspot.com/2008/02/cursileras.html
Las Expectativas: http://sinpresas.blogspot.com/2008/01/las-expectativas.html


S.